29 de junio de 2008

El LADO OSCURO, 2ª parte.



Continuamos con el oculto lado oscuro. Oculto por lo escondido, también es tiempo de señalar que es el momento de empezar a cuestionar todas las verdades oficiales, de todo aquello que hemos aprendido, partiendo por las falsas verdades de la ciencia y la religión, hasta de las verdades esotéricas, entregadas a través de escuelas esotéricas o de iluminados entre otros, porque ya es tiempo. Es el tiempo del replanteo para una gran mayoría, ahora que tenemos mayor Luz, mayor cantidad de Luz en el planeta, que permite poder explorar otras realidades e ir en busca de las verdades absolutas, las cuales antes estaban totalmente vedadas, de tal modo que grandes iluminados hicieron muchos e importantes esfuerzos, pero hubo verdades a las que no pudieron llegar, quiero recalcar que los tiempos son otros, es altamente posible que si estos seres, hubiesen hecho lo que hicieron en el pasado en estos momentos, llegasen necesariamente a otras conclusiones, distintas de aquellas que existen y se enseñan al día de hoy en las escuelas de la nueva era, son pocos los autores que se salvan de esto. Las verdades eternas, son las enseñadas por Jesús, por Buda y otros grandes iniciados, pero ellos no escribieron libros de tal modo que lo que hemos estado estudiando son interpretaciones de otros iluminados, en eso yo rescato a Rudolf Steiner que hizo averiguaciones por si mismo en condiciones especiales hace solo un siglo. El pudo hacer estos descubrimientos porque investigó y experimentó por su cuenta; además también investigó a algunos personajes del lado oscuro que mencionaremos próximamente.
¿Porqué tenemos lado oscuro? principalmente, por nuestro origen. Todos -la mayoría- concordamos que existe la dualidad en estos planos pero no hay coherencia entre el saber y el actuar, en otras palabras ha sido una intelectualización y punto, una mera entelequia, nunca vivimos las cosas realmente en conciencia. Si existe la dualidad en nuestro universo existe en nosotros también, somos parte del mismo universo por si no lo sabían, entonces lo que hay fuera hay dentro, y nuestra conciencia se halla dividida en esta dualidad, hay una cuota de sombra y otra cuota de Luz, esto es lo que significa el Yin y el yang aparte de lo femenino y masculino, pero ese símbolo refleja equilibrio y la pregunta obligada ahora es ¿tenemos o reflejamos nosotros ese equilibrio? ¿qué les parece a ustedes? en realidad no hay que pensarlo mucho, baste con mirar un poco las noticias o subirse al metro para ver el tremendo desequilibrio existente y volvemos a la misma pregunta ¿porqué? la respuesta es la misma, la existencia del lado oscuro, pero un lado oscuro que nos lleva ventaja, amplia ventaja, la proporción está dada por los tamaños entre el consciente y el inconsciente, o dicho de otra manera donde se manifiesta el alma consciente y el lugar desde donde se manifiesta la oscuridad eso está en la 1ª parte de esta exposición.
En vista de que algunos, bueno, la mayoría son ver para creer, ¿existe alguna documentación en la que crean que pueda demostrar lo que digo? si, si existe y mucha, pero para comenzar voy a citar el rollo de Juan de la Biblia interpretada por mi, ¡afirmense los pantalones! (o la falda), voy a aprovechar de explicar dos cosas de una, -nuestro orígen y nuestro lado oscuro- dice en el capítulo 8, -que os sugiero leer completo- debemos entender que los judíos de la época, en la actualidad somos nosotros, somos el equivalente a ellos. Versículo 21 Entonces les dijo otra vez: ¡Yo me voy y ustedes me buscarán, y sin embargo morirán en su pecado. A donde yo voy ustedes no pueden venir. ¿porqué no podríamos ir, si todos saben que al final del tunel oscuro está la Luz? Jesús responde a esto Cap. 3 vers. 12 Si les he dicho cosas terrenales y sin embargo no creen, ¿cómo creerán si les digo cosas celestiales? 13 Además ningún hombre ha ascendido al cielo sino el que descendió del cielo el Hijo del Hombre. Valga decir para el que no lo sepa, que el hijo del hombre es un apelativo referido en forma exclusiva a Cristo, aquí nos señala de manera específica que nadie ha subido, es chistoso pensar entonces en la cantidad de gente que se muere y sus deudos sufrientes señalan que el difunto está en el cielo mirándolos, ¿¿en cual??. Volvamos al cap. 8 vers. 13..."Tu das testimonio acerca de ti mismo; tu testimonio no es verdadero". 14 En respuesta, Jesús les dijo: Aunque doy testimonio acerca de mi mismo, mi testimonio es verdadero porqué se de donde vine y a donde voy. Pero ustedes no saben de donde vine ni a donde voy. Aprovecho de preguntarte a ti que estás leyendo, ¿tú, si sabes de donde vienes y a donde vas?. Vers. 22....El no va a matarse ¿verdad? porque dice: ""A "donde yo voy ustedes no pueden venir". 23 Así que pasó a decirles ""Ustedes son de las regiones de abajo; yo soy de las regiones de arriba. Ustedes son de este mundo yo no soy de este mundo. El sentido y el lenguaje es claro no hay dos interpretaciones distintas posibles. Sigamos Vers. 38 Cuantas cosas he visto con mi Padre las hablo, y ustedes, por tanto, hacen las cosas que han oído de su Padre. Esta es una primera vez en que hay un reconocimiento explícito de que no tenemos el mismo origen lumínico divino de Jesús. Vamos a lo profundo ahora, ¡a ver Jesús! ¡dinos entonces quienes somos nosotros! Vers. 44 Ustedes proceden de su padre el diablo, y quieren hacer los deseos de su padre. Ese era homicida cuando principió, y no permaneció firme en la verdad, porque la verdad no está en el. Cuando habla la mentira, habla según su propia disposición, porque es mentiroso y el padre de la mentira.
FIN DE LA SEGUNDA PARTE. Continuará......

17 de junio de 2008

EL SENDERO OCTUPLE

La segunda parte (no la final) del lado oscuro vendrá posiblemente a continuación de este post la próxima semana, debido a la importancia de nuestra liberación justamente del lado oscuro es que me veo obligado con gusto a entregar el gran proceso de la liberación.



Una de las grandes contribuciones de Buda a nuestra humanidad, es un camino, los senderos que debemos realizar todos, no es algo para leer ni entender intelectualmente es un avanzar en la conciencia; llamado por el budismo NOBLE SENDERO OCTUPLE. Es de una gran importancia su realización por cada uno de nosotros.

Dice el diccionario budista de Bhikku Saddhamanda:
“Noble se considera a quien alcanzó una de las ocho etapas tradicionales de Santidad. Los nobles abarcan 4 categorías: Quien entró en la corriente; Quien retorna una sola vez; Quien jamás retorna; y el Arhat o Santo propiamente dicho.

Las etapas de santidad se dividen en 2 grupos de 4 aspectos cada uno. En ambos se hace referencia a la realización del sendero, entendiéndose como tal al “sendero supermundano” y, al mismo tiempo, al acto o instante de ingresar en los estadios de Santidad. En cuanto a “disfrute” se significa con ello momentos de consciencia, repetibles bajo diferentes circunstancias y en incontables ocasiones durante la vida, como consecuencia de la realización del Sendero.

El primer grupo incluye:
-Realización del Sendero por parte de quien entró en la corriente;
-Realización del disfrute por parte de quien entró en la corriente;
-Realización del sendero por parte de quien retorna una sola vez;
-Realización del disfrute por parte de quien retorna una sola vez.

El segundo grupo comprende:
-Realización del sendero por parte de quien jamás retorna;
-Realización del disfrute por parte de quien jamás retorna;
-Realización del Sendero de la santidad;
-Realización del disfrute de la santidad.

La realización del Sendero por parte de quien entró en la corriente implica “pasar a liberarse” de la duda escéptica, de la creencia en la propia personalidad y del apego a normas y ritos.
La realización del disfrute por parte de quien entró en la corriente importa estar liberado de esas tres ataduras.
La realización del sendero por parte de quien retorna una sola vez significa la cuasi liberación de la malevolencia y el deseo sensual. La realización del sendero por parte de quien retorna una sola vez establece la liberación cabal de la duda escéptica, la creencia en la propia personalidad, el apego a normas y ritos, la malevolencia y el deseo sensual. La realización del sendero de santidad culmina con la liberación de las ataduras anteriores, más las siguientes: Infatuación, ignorancia, desasosiego, anhelo de existencia material sutil y anhelo de existencia inmaterial.
El sendero octuple es una vía a alcanzar de manera imperativa, quien no lo haga difícilmente verá lograda su liberación.
“El camino que permite la desaparición del dolor es la Ley (Dharma), la cual puede dividirse en lo que se llama el octuple sendero.


Son ocho reglas sustantivas:
-recto entendimiento
-recto pensamiento
-recta palabra
-recta acción
-recta vida
-recto esfuerzo
-recta atención, y
-recta concentración.

Leamos a Steiner, (Evangelio de Lucas) siempre brillante, “El buda decía: La causa del sufrimiento en el mundo proviene del hecho de que de las encarnaciones anteriores subsiste algo de que el hombre nada sabe. Lo que el retiene de sus encarnaciones anteriores es la causa de su no conocer nada del mundo, y esto es la causa del sufrimiento y del dolor, de la pesadumbre y la preocupación. Pero si el llega a ser consciente de las fuerzas que se hallan en su cuerpo astral y que el puede emplear, entonces puede, si el quiere, adquirir un conocimiento independiente de todo lo anterior, un conocimiento suyo propio.

Esto es el conocimiento que el Buda quiso dar a los hombres por medio del “Sendero de ocho etapas”, en que se indican las fuerzas que el hombre debe desarrollar a fin de adquirir en el actual ciclo de la humanidad un conocimiento no influenciado por las reencarnaciones sucesivas. Por la fuerza que el mismo Buda había alcanzado, el elevó su alma a lo que es posible adquirir por las fuerzas supremas del cuerpo astral; y en el “Sendero de ocho etapas” quiso señalar a la humanidad el camino del conocimiento no influido por Samskara*.
Lo definió de la siguiente manera:
El hombre llega a obtener semejante conocimiento del mundo, si con relación a cada cosa se forma un correcto concepto, que nada tenga que ver con simpatía o antipatía o, quizá, porque sea de su agrado, sino esforzándose en obtener el “concepto correcto” de cada cosa, puramente según los fenómenos que se le presentan en su aspecto exterior. Esto es lo primero formarse el “concepto correcto” de una cosa.
En segundo lugar es preciso volverse independiente de cuanto ha quedado de las encarnaciones anteriores y esforzarse en juzgar también de acuerdo con nuestro concepto correcto; no por cualesquiera otras influencias, sino únicamente de acuerdo al concepto correcto que nos hayamos formado al respecto. El segundo factor consiste, pues, en el “juzgar correcto”.
En tercer lugar se trata de que, cuando nos dirigimos al mundo, hemos de esforzarnos en expresar también correctamente lo que queremos comunicar, de acuerdo con nuestro concepto correcto y juicio correcto; esto requiere que a nuestras palabras no agreguemos nada, aparte de aquello que realmente es nuestra opinión; y no solamente a nuestras palabras, sino a todo lo que sea expresión de nuestro ser.
En cuarto lugar es preciso esforzamos en no actuar según nuestras simpatías y antipatías, ni tampoco según aquello que sombría­mente nos agita como Samskara, sino en tratar que se convierta en acción lo que hayamos captado como el concepto correc­to, el juicio correcto y la palabra correcta. Esto es, por consi­guiente, la acción correcta, el "modo correcto de actuar".
La quinta capacidad que el hombre necesita para liberarse de lo que vive en él, es adquirir la correcta posición, la situación correcta en el mundo. Veremos claramente a que se refería el Buda, si nos decimos: hay tantas gentes que no están contentas con su quehacer en el mundo y que piensan que en esta o aquella po­sición podrían desenvolverse mejor. Pero el hombre debiera ha­cer lo posible a fin de alcanzar lo mejor que pueda dentro de la situación en que ha nacido o en que el destino le ha colocado, quiere decir, situarse en la mejor "posición". Quien no se sienta conforme con la situación en que se encuentra, tampoco podrá ganar de ella la fuerza que le pueda conducir al correcto actuar en el mundo. A esto el Buda lo llama conquistar la "posición correcta".
El sexto paso, consiste en que hagamos todo lo posible para que lo ya alcanzado, o sea, el concepto correcto, el co­rrecto juzgar, etc., se transforme en nuestra actitud habitual. En la infancia tenemos esta o aquella inclinación o hábito. Pero el hombre debe esforzarse en no conservar los hábitos que pro­vienen del Samskara, sino en adquirir los hábitos en que se con­vierten gradualmente el correcto concepto, el correcto juzgar, la correcta palabra, etc. Estos son los "correctos hábitos" que de­bemos adquirir.
En séptimo lugar debiéramos poner orden en nuestra vida de tal manera que en nuestro actuar de hoy jamás nos olvidemos de lo realizado ayer. No alcanzaríamos nada en la vida, si cada vez tuviésemos que volver a aprender nuestras habilidades. El hombre debiera tratar de formarse- pensamien­tos y memoria de todo lo relativo a su existencia y, constante­mente debiera aprovechar lo ya aprendido, enlazando el presente con el pasado. Esta es la "memoria correcta" -en sentido bu­dista- del que el hombre debe apropiarse en el sendero de ocho etapas.
La octava facultad consiste en que el hombre, sin pre­dilección por esta o aquella opinión, sin dejarse guiar por lo que le ha quedado de encarnaciones anteriores, logre entregarse pu­ramente a las cosas, las contemple y las deje hablar a sí mismo, con exclusión de todo lo demás. Esta es la "contemplación co­rrecta".
He aquí el "Sendero de ocho etapas" del cual el Buda decía a sus discípulos que su observancia conduciría, paso a paso, a apagar la sed de existencia que es la causa del sufrimiento, y a dar al alma lo que la libera de todo aquello que proviene de las vidas pasadas y que la reduce a la esclavitud.“



Al haber hecho esto Gautama Buda, significa que todos tenemos las causas para poderlo hacer. Como casi para todas las cosas, esto es libre albedrío, o sea, el ejecutarlo o no, el recorrer estos senderos o no, pero como tal opción que se nos presenta, el que no la tome debe responsabilizarse en el sentido de su no liberación, difícilmente la divinidad va a hacer algo por aquel que no hace nada por si mismo. Tomémosle el peso a lo hecho por Buda, así como Cristo Jesús y otros, que han desarrollado una planificación divina para nuestra salvación, esta es la gran ayuda de la divinidad. Tómala o déjala, pero en forma responsable, asume tus propias decisiones y las consecuencias de ellas. Esto es el gran legado de Buda a la humanidad de nuestro planeta, como estoy viendo las cosas al día de hoy.
*saṃskāra (संस्कार): MW1153.2 (masculino) latencia; sam (junto, completo) + kāra (acto de hacer, de trabajar), deriva de √kṛ (hacer, representar); 1) impresión latente o subliminal; huella psíquica dejada por una experiencia anterior en la memoria profunda; 2) consecuencia de una acción que condiciona otra futura; I.18 - I.50 - II.15 - III.18; saṃskārayoḥ (masculino, genitivo, dual) III.9 - IV.9; saṃskārāt (masculino, ablativo, singular) III.10; saṃskārebhyaḥ (masculino, ablativo, plural) IV.27

11 de junio de 2008

El LADO OSCURO, 1ª parte.

 



Este suele ser un escabroso tema del que feliz sería de rehuir, es casi como hablar del ego, muy desagradable, pero absolutamente necesario si es que uno en verdad desea evolucionar. Tiene que ver con reconocer nuestro origen y saber quienes somos en verdad, no quienes soñamos ser, porque para sueños... llevamos tanto tiempo, es el momento de enfrentarnos a nuestra dura y cruda realidad, somos y hemos sido parte de la oscuridad, hay una gran parte de ella que se ha mantenido escondida de todos porque, está en el inconsciente, la que vemos es aquella que se materializa a través del consciente de las personas. En definitiva siempre hemos visto lo que hemos querido ver y que nos ha permitido nuestro ego, no la verdad, ni la realidad. La mejor manera que he encontrado para explicar esto en palabras simples y claras, es que somos como un jardín y este jardín se divide en tres partes distintas, una es el consciente, la menor -cerca del 5%- otra parte es el subconsciente que representa cerca del 10 al 15% y la última que es entre el 80 al 85% de la conciencia que es el inconsciente. El ego nos dice que el jardín tiene una única planta que está en el antejardín y que todos ven, este es el consciente, este es un rosal o tulipán o loto o la flor que ustedes quieran ser, total es su ego, y este dice que no hay nada más. Pero si miramos hacia atrás veremos que el jardín es grande y que atrás camufladas hay grandes enredaderas, plantas carnívoras, maleza. etc. De allí, de nuestra oscuridad interna que está en contacto y conexión con la oscuridad externa es de donde salen todos los males de todas las civilizaciones humanas o no humanas, en este y otros planetas en los que hayamos habitado.

¿Tenemos que saber esto? si, absolutamente porque es labor personal el reconocer todas y cada una de las plantas, pues se presenta la opción de desmalezar y arrancar de raíz, valga la redundancia, la raíz de todos los males en nosotros mismos.


El que lo investiguen y lo corroboren en forma personal, los hará crecer y a la larga será gratificante, a la corta puede ser muy triste, pues la oscuridad a uno se le va encima por haberse rebelado y lo suele pasar mal, pero es el precio a pagar por la libertad. En fin depende de cada uno de ustedes cuando empezará el proceso si es que así lo desea.
A mi en lo personal me ha tocado sufrir mucho por ello, pero no me arrepiento de esto, se que es lo correcto.
He podido comprobar la molestia que le produce a la gente que gusta del esoterismo pero que no saben nada sobre este tema, la negación y bloqueo que provoca el que se les insinue siquiera la existencia de su lado oscuro, lo cual queda demostrada por la sola molestia y rabia que produce. Es entendible en todo caso, esta situación, ya que vivir pensando en que somos seres de Luz durante toda una vida -casi iluminados- y de pronto que alguien venga a cambiar su forma de vida y terminar con ese sueño, produce molestia, una evidente molestia ya que a nadie le gusta ser despertado y encontrarse con algo que ni siquiera saben como abordar, en esos momentos el ego revienta a más no poder, y se expresa, negando con toda su fuerza, la angustia y rabia al sentirse descubierto ya que siempre había actuado en la impunidad del inconsciente de cada persona que creía en una pureza de conciencia. Lo primero que hace la mente es un bloqueo irracional diciendo que esta idea es irracional, lo cual no tiene nada de efectivo, esto es completamente racional, el descubrir por uno mismo lo que otros iluminados han señalado no hace que sea irracional, que la mente intelectual no tenga la información no hace que sea irracional o descabellado, muy por el contrario, permite entender tantas cosas que ocurren en el mundo y en nosotros mismos, da luz a todo esto un sin fin de situaciones continuas que han tenido malas explicaciones porque han partido de falsas premisas y por ende se han abordado mal.
El mal no es algo que hay fuera y que circunstancialmente le llega a uno y lo vuelve malo, o que se tiene una conciencia consciente que es mala, oscura o una lumínica como sostiene el ego de los detractores de esta verdad. Esto para mi si que es absurdo. Es ridículo en términos reales, si hay conciencia esta es como lo dice su nombre conciencia y esta en si no cambia porque si a momentos del día. La conciencia suele transformarse producto de trabajo y este ocurre generalmente de manera positiva, entonces ¿qué es lo que hace que personas sufran transtornos y maten, a otras personas o agredan a sus semejantes de las mas diversas maneras?Mi respuesta es simple se manifiesta el lado oscuro en nosotros, desde el inconsciente domina al consciente en pro de su manifestación, aquella que le es natural y que ha acompañado a esta alma por mucho tiempo.

Un acercamiento al tema está en este video: tengamos presente que Jung escribió sobre esto hace 1 siglo, aproximadamente, así es que está suavizado y por supuesto incompleto.

8 de junio de 2008

HOMENAJE A RUDOLF STEINER


Como saben los que me conocen soy un profundo admirador y seguidor a mi manera de este gran iniciado, el que a mi modo de ver califica más para Bodisattva, por la manera en la que entregó tantas ayudas a la humanidad, en fin les dejo una de sus conferencias, de hace más de un siglo, vigentes hoy como antes.


Que brillante eras Rudolf, espero tener la oportunidad y el honor de conocerte en tu próxima reencarnación.


EL DESARROLLO INTERIOR DEL HOMBRE

Una ponencia de Rudolf Steiner. Berlin, 15 de Diciembre de 1904


Recientemente me he propuesto hacer un boceto sobre el ser del hombre y los tres mundos que le rodean: el mundo físico actual, el mundo del alma y el mundo del espíritu. Más adelante tengo planeado hablar de los conceptos antroposóficos principales sobre el origen del hombre, la tierra y los cuerpos celestiales en general. Así habremos repasado el punto de vista general en la teoría de la vida, según es desarrollada por la antroposofía.
De cualquier forma, hoy me gustaría presentar unas pocas sugerencias acerca de la manera en que el desarrollo interior del hombre debe progresar si desea llegar a sus propias conclusiones sobre los principios proclamados por la visión antroposófica del mundo. Hay que tener en mente que hay una gran diferencia entre llegar a un entendimiento de los conceptos presentados por un científico espiritual como una verdad obtenida a través de su cognición y su experiencia, y el desarrollo del alma y espíritu humanos que permite a una persona mantenerse en dicha cognición y percepción propias.
Uno tiene que distinguir entre un nivel elemental de desarrollo que lleva a la comprensión de las enseñanzas de un maestro espiritual experimentado, siguiéndolas como si fuera en pensamiento y en sentimiento y entendiéndolas como verdad dentro de unos límites, y un nivel avanzado en el cual uno obtiene las experiencias personales en el ámbito del espíritu y el alma. Este nivel elemental es nuestro tema de hoy. El nivel avanzado concierne la clarividencia y hasta el punto en que es posible siquiera dar ninguna indicación en público sobre la clarividencia, ese será el tópico de nuestra próxima presentación. El problema de cómo uno puede lograr el entendimiento personal de las verdades antroposóficas es el tema que nos ocupará hoy.
Solo podemos dar aquí unos pequeños apuntes ya que el entrenamiento que el alma y el espíritu humanos deben llevar a cabo para adquirir el entendimiento antes mencionado es muy extenso. Requiere un largo período de estudio interior y los numerosos detalles de este entrenamiento no se pueden elaborar en el curso de una breve charla. La información a la que nos podemos referir aquí es solo un pequeño apunte de lo que sería expresado en instrucciones personales. Dicho esto es necesario hacer notar antes de nada que la mayoría de la gente necesita en este campo la ayuda de un maestro personal. Algunos son de la opinión que una persona puede desarrollar el mismo habilidades interiores, fuerzas del alma y percepción espiritual por sus propios medios, y puede parecer desafortunado que en esta área vital de la vida una guía personalizada sea supuestamente necesaria. De cualquier modo, la naturaleza de esta guía da las suficientes garantías para que nadie, bajo ningún concepto, pueda llegar a tener ningún tipo de dependencia de otra persona. Nadie honra la dignidad del hombre y el respeto por el individuo más que el maestro de lo oculto. El instructor del desarrollo místico y antroposófico nunca da nada más que consejo.
Los más grandes maestros en este campo nunca hicieron más que sugerir y aconsejar. Se deja al libre albedrío del individuo hasta que punto pretende seguir estos consejos. Las tareas del espíritu y del alma que uno se propone dependen del individuo; la consideración por la libertad humana por parte del maestro es demasiado pronunciada como para pretender dar más que consejo. En esta área, todo lo que pueda ser expresado de cualquier manera, debe ser entendido con esta reserva.
Otro punto importante es que la parte principal de esta educación no se expresa en ninguna formalidad externa particular, tampoco requiere una medida externa definida. Esta educación es más bien un desarrollo completamente íntimo del alma humana y todos los grados significantes del desarrollo que uno debe llevar a cabo se dan lugar en la profundidad más íntima del ser. Precisamente aquí se lleva a cabo una transformación en la persona, pero no es necesario que nadie, ni siquiera su mejor amigo, note ninguna diferencia. Así, en privado, en tranquilidad y en reclusión el místico se entrena a sí mismo para adquirir el entendimiento de los mundos del alma y del espíritu. No se puede enfatizar lo suficiente que nadie que se proponga a sí mismo al desarrollo espiritual interior necesita cambiar su ocupación en ningún aspecto ni tampoco descuidar sus tareas diarias. Al contrario, aquel que crea que para su desarrollo interior es necesario más tiempo y como consecuencia descuida sus ordinarias obligaciones y de sus intentos de interiorización adentro de los mundos espirituales se convierte en un anti-social o en un miembro inferior de la sociedad descubrirá muy pronto que de esta manera se logra mucho menos.
Este entrenamiento interior progresa discretamente y sin prisa, en completa tranquilidad interior. Quiero hacer énfasis en este punto, que ninguna "regla especial" va a ser expuesta ahora sino descripciones de ese camino de desarrollo interior. Las directrices, cuando son observadas, sí requieren algo del aspirante sin lo cual nunca podrá lograr ninguna experiencia personal más elevada. Se trata de la resistencia. Aquel que no tiene paciencia y resistencia, quien no puede perseverar una y otra vez y seguir en completa calma las normas interiores que son aplicables aquí, generalmente no logrará nada en absoluto. Solo hay una rara excepción que hace posible el éxito sin la observación de estas reglas. Este es el caso en el cual un individuo esta muy avanzado en su camino de evolución como ser humano. En el caso de un individuo que en una reencarnación anterior ya ha obtenido un cierto nivel de clarividencia el curso del entrenamiento interior es bastante diferente y mucho más corto. Aquel que da las reglas correspondientes para el desarrollo interior ser consciente de este hecho y su trabajo entonces se limita a eliminar los obstáculos que bloqueen el camino hacia la iluminación.
Ya que las directrices en el camino a la iluminación varían con cada individuo, es una regla no recomendable el buscar el desarrollo místico sin guía personal. Aquel que expone las líneas a seguir debe conocer estrechamente a su pupilo, no en el sentido ordinario de la palabra sino en el sentido espiritual. Mientras el maestro de lo oculto no necesita conocer nada de la profesión de su pupilo, manera de vida, miembros de su familia, sí necesita adquirir un conocimiento íntimo de la condición de su alma y espíritu y de su nivel de desarrollo. Nos llevaría demasiado lejos exponer hoy las maneras y los métodos según los cuales el maestro de lo oculto adquiere este conocimiento. Serán discutidas en ponencias futuras sobre clarividencia.
El desarrollo interior está conectado con ciertas consecuencias para aquellos que se aventuran en este camino y deben darse cuenta que, como resultado, ciertas definidas cualidades aparecerán en su personalidad. Estas cualidades son síntomas y resultados directos del nivel de desarrollo interior y requieren observación cuidadosa. El maestro de lo oculto debe conocer cómo interpretar estos síntomas para asegurar la manera apropiada para proseguir en este desarrollo interior.
El desarrollo del hombre interior es el nacimiento en un nivel superior. Es el nacimiento del alma y el espíritu, no en el sentido figurativo, alegórico, pero como un hecho en el sentido literal de la palabra. Incluso en este rea un nacimiento no lo es sin consecuencias y el maestro de lo oculto debe saber como tratarlo.
Después de un contacto inicial con algunas de las enseñanzas básicas de la antroposofía tal como la reencarnación y el karma, la doctrina según la cual el alma humana se ha reencarnado en el pasado repetidas veces en un cuerpo físico y que continua retornando en futuras encarnaciones, y la enseñanza del karma, de la justicia compensatoria --la mayoría de la gente se preguntará como uno puede adquirir el entendimiento de estas por si mismo. Esta es la gran cuestión que confronta ahora a cada persona. Hay una regla dorada que debe ser observada, que eventualmente guiará a cualquiera a la comprensión deseada. Esta ha sido la experiencia común de todos quienes se han dedicado seriamente a los ejercicios en cuestión. No hay nadie que no pueda, de la manera más fácil posible, adquirir esta comprensión de la reencarnación y el karma.
De cualquier modo, como decía Goethe "aunque es fácil, lo fácil es difícil." Esto es así porque pocos son los que deciden emplear la fuerza de voluntad, resistencia y la paciencia necesarias para alcanzar ciertas condiciones definidas del alma y el espíritu esenciales para esta comprensión. La regla de oro es esta "vive tu vida como si la reencarnación y el karma fuesen verdades y llegarán a ser verdades para ti." Parece como si hubiese que alcanzar esto mediante la autosugestión pero no es el caso. El símbolo místico de la serpiente que se muerde su propia cola es un símbolo familiar. Este símbolo tiene varios significados profundos pero entre las muchas interpretaciones que contiene, una es la que aquí hemos expresado en la regla de oro.
Es evidente que la suposición inherente en esta regla de oro se niega a sí misma de la misma manera en que la serpiente se enrosca sobre sí misma. ¿ Cómo debemos entender esto? Si la reencarnación es un hecho, entonces ciertos esfuerzos hechos por el hombre y que tienen un efecto en su alma no pueden ser hechos en vano, sino que más adelante deben convertirse en la naturaleza del alma. Una de las grandes leyes del hombre que debe ser probada, íntimamente sobre su propio ser, es expresada en un antiguo texto Indio, "lo que piensas hoy, serás mañana." Aquel que cree en la reencarnación debe darse cuenta que una cualidad que desarrolla dentro de sí mismo, un pensamiento que imprime sobre sí mismo al mantenerlo constantemente en la mente, se convierte en algo permanente en su alma que volver a emerger una y otra vez. Siendo así, una persona que busca el desarrollo místico debe antes de nada hacer el esfuerzo de abandonar algunas inclinaciones que tuviese con anterioridad. Entonces, las nuevas inclinaciones deben ser adquiridas manteniendo constantemente en nuestra mente el pensamiento de ese tipo de inclinaciones, virtudes o características. Deben de ser incorporadas de tal manera en el Ser que la persona es capaz de alterar su alma con la fuerza de su voluntad. Esto debe ser probado tan objetivamente como una substancia química es probada en un experimento. Una persona que nunca haya intentado cambiar su alma, que nunca ha tomado la decisión inicial de desarrollar las cualidades de la resistencia, steadfastness y el pausado pensamiento lógico, o una persona que tiene esa decisión pero la ha abandonado porque no tuvo éxito en una semana, un mes, un año o una década, nunca logrará determinar nada en si mismo acerca de estas verdades.
Así es el íntimo sendero que el alma debe recorrer. Debe ser capaz de adquirir nuevas características, pensamientos e inclinaciones. Una persona debe tener la habilidad de emerger, en el momento que corresponda, con nuevos hábitos adquiridos por pura fuerza de voluntad. Una persona descuidada debe acostumbrarse a ser cuidadoso y ordenado y esto debe llevarse a cabo no a través de una presión externa sino por una firme resolución de la voluntad. Es especialmente efectivo en el caso de características insignificantes y pequeñas cosas. Cuanto más claramente perciba la persona los asuntos que le conciernen, mejor será su comprensión en el área de la verdad. Si, por ejemplo, una persona es capaz de observar objetivamente un gesto, una expresión facial o algún otro hábito insignificante, si se hace consciente de él como si estuviese observando a otra persona y entonces por pura fuerza de voluntad pone en el lugar del hábito o gesto algo que el mismo ha escogido, incorporándolo a sí mismo, esa persona está ya en el camino que lleva a la comprensión, por si mismo, de la gran ley de la reencarnación. Un químico puede dar descripciones de procesos que tienen lugar en un laboratorio. De forma parecida una persona puede establecer las directrices a probar sobre sí mismo. A trabes de alteraciones insignificantes se alcanzan las más altas cumbres.
Acerca del Karma, la gran ley de la justa compensación, su percepción y entendimiento puede ser obtenida si uno vive su vida como si el karma fuese un hecho. Si un desastre o sufrimiento te acaece, intenta mantener en mente que este sufrimiento o accidente no ha ocurrido por alguna milagrosa casualidad sino que debe haber una causa. No necesitas buscar la causa. Solo aquel que clarividentemente pueda disponer de una visión del karma podrá percibir la causa de un feliz evento, de una pena o de algún infortunio. Lo que sí es necesario es un cierto estado de ánimo, una sensación a la que rendirse para que puedas sentir cómo una pena o una alegría deben tener su causa y al mismo tiempo puedan causar otros eventos en el futuro. Aquel que se empapa con este estado de ánimo y ve su vida y todo lo que le sucede como si el karma fuese un hecho, encontrará que esta existencia se le hará cada vez más comprensible. Aquel que suprime su enfado cuando algo molesto le sucede y en su lugar piensa que, igual que una piedra rueda al ser empujada así ese algo molesto debe haber sucedido de acuerdo con alguna inevitable ley del universo, adquirirá la comprensión del karma. Tan cierto como que mañana te levantarás por la mañana, dadas las circunstancias necesarias y sin que tu salud sufra ningún cambio, es igualmente cierto que comprenderás la ley del karma si ves tu vida de esta manera.
Hay dos prerrequisitos para una persona que desee la educación espiritual; el aspirante debe ver la vida de esta manera. Pero no debe aceptar estas actitudes del pensamiento como si fuesen un dogma. Por el contrario, debe dejar abierta la posibilidad a que sean ciertas o no. No debe tener ni superstición ni dudas porque estos son los dos mayores obstáculos. Solo una persona que ve la vida de esta manera, con una mente abierta, está preparada para recibir instrucción mística.
Aún hay un tercer aspecto que debe ser considerado. Ningún maestro de lo oculto instruirá a una persona llena de supersticiones y prejuicios, o una que sea proclive a juicios insensatos o a caer víctima de cualquier ilusión. La regla de oro aplicable aquí es que, antes de dar el primer paso en la dirección de una aprendizaje superior una persona debe liberarse de cualquier pensamiento frívolo o posibilidad de confundir la ilusión con la realidad. Por encima de todo el aspirante a la iluminación espiritual debe ser una persona que se dedica a observaciones y pensamientos disciplinados. Si una persona se inclina hacia los prejuicios y la superstición en el mundo de la realidad de los sentidos enseguida tiende a ser corregida por la propia realidad de los sentidos. Sin embargo, si una persona no piensa lógicamente y se deja llevar por las fantasías entonces la corrección no es tan simple. Siendo así, es esencial que uno tenga su vida-del-pensamiento completamente a mano y que sea capaz de ejercer un control estricto sobre sus pensamientos antes de adentrarse en los mundos del espíritu y del alma. Uno que se inclina fácilmente hacia fantasías, supersticiones e ilusiones no está preparado para entrar en la educación previa a la enseñanza espiritual. Pero es fácil engañarse aquí. La liberación de las fantasías, ilusiones, prejuicios e ilusiones se obtiene con autodisciplina. Esta libertad no se adquiere fácilmente por cualquiera. Es necesario recordar hasta que punto la mayoría de la gente tiende a pensamientos torpes y descuidados y son incapaces de controlar su vida-del-pensamiento a través de su propia fuerza de voluntad.
Al sopesar las demandas de la vida diaria es evidente que es imposible liberarse completamente a sí mismo de las impresiones exteriores. Para poder hacerlo es necesario apartar un pequeño periodo de tiempo cada día. Este período de tiempo, que es necesario pero que no debe suponer un conflicto con nuestras obligaciones, es suficiente. Cinco minutos, o incluso menos, es bastante. Durante este breve período de tiempo una persona debe ser capaz de separarse de todas las impresiones sensoriales, de todo lo que le llega a través de los ojos, oídos y su sentido del tacto. Durante este breve período de tiempo debe volverse ciego y sordo a su entorno exterior. Todo lo que nos asalta desde el mundo exterior nos une con la sensualidad y el ordinario mundo diario. Todo esto debe ser silenciado y la total calma interior debe tomar su lugar. Cuando este silencio interior, este despojarse de todas las impresiones sensoriales se ha llevado a cabo la memoria de todas las impresiones sensoriales pasadas deben ser extinguidas también. Es suficiente sopesar durante un momento cómo estamos completamente atados a los asuntos del tiempo y del espacio, con todo lo que es temporal y mortal. Analiza el pensamiento que acaba de pasar por tu cabeza hace un momento y ve si no está asociado con algo de naturaleza transitoria. Este tipo de pensamientos no tienen valor para el desarrollo interior.
Así todos los pensamientos que nos conectan con asuntos finitos y transitorios deben ser silenciados. Entonces, cuando ese silencio ha sido producido en el alma y durante un rato nuestro entorno, ya sea de la era, la nación, la raza o del siglo en que vivimos, ha sido eliminado, el alma volverá a hablar por sí misma. Esto no sucederá inmediatamente. Primero el alma debe estar preparada para este punto y hay maneras y direcciones que traerán este sonido interior. El hombre debe rendirse a pensamientos, conceptos y sentimientos originados no en lo temporal sino en lo eterno. Su contenido no debe ser verdadero para hoy, ayer, un siglo o mañana sino para siempre. Este tipo de pensamientos se encuentran en los libros religiosos de todos los pueblos. Se encuentran, por ejemplo, en el Bhagavad Gita, el himno de la perfección humana. También se encuentran en el Antiguo y el Nuevo testamento, particularmente en el Gospel of St. John empezando por el capítulo decimotercero. Pensamientos efectivos también se encuentran en las cuatro primeras líneas del libro, Light on the Path de Mabel Collins, familiar para los miembros de los Movimientos Theosóficos y Anthroposóficos.
Estas cuatro líneas, grabadas en los muros interiores de cada templo de iniciación no dependen del tiempo y del espacio. No pertenecen a un hombre, una familia. No forman parte de una generación o de un siglo. Si no que se extienden a través de toda la evolución. Eran ciertas hace miles de años y lo seguirán siendo miles de años más. Despiertan las adormecidas facultades del alma; déjalas levantarse de su reino interior. Pero es necesario que esto sea entendido correctamente. No es suficiente asumir que se ha comprendido el sentido de estas frases. Uno debe permitir que estas palabras cobren vida en su propio ser interior. Uno debe permitir que el significado completo de estas palabras irradie en el interior de su ser, debe rendirse a él por completo. Uno debe aprender a amar esas palabras. Si una persona cree que ha comprendido el significado, solo entonces ha llegado el momento correcto para que esas palabras se levanten en el resplandecientes una y otra vez. La comprensión intelectual no es importante; el amor de esa verdad espiritual sí lo es. Cuanto más amor hacia esas verdades fluya a través de ti más poder de visión interior crecerá en nosotros. Esas palabras no deben ocuparnos uno o dos días sino semanas, meses y años hasta que finalmente se despierten en nosotros esos poderes del alma. Entonces finalmente llega cierto momento bien definido en que aún otra iluminación toma lugar. Aquel que proclama verdades espirituales por su propia experiencia está familiarizado con esta vida de contemplación interior. Las grandes verdades espirituales que proclama cada día son una parte de una vasto panorama espiritual que puede ver con el poder interior del alma y el espíritu. Vuelve su vista a los reinos del alma y el espíritu. Aparta su mirada de la tierra para explorar los sistemas solares. Aún así este poder interior se extinguiría rápidamente si no se nutre cada nuevo día. Este es el secreto del investigador espiritual, que este inmenso panorama de universo y humanidad que ha pasado por su alma cientos de veces debe pasar de nuevo por su alma cada mañana. Una vez más comprenderlo todo no es lo importante sino aprender a amarlo más y más. Así cada mañana lleva a cabo una adoración divina durante la cual mira en reverencia a los grandes espíritus. Ha aprendido a repasar el panorama completo en unos pocos minutos. La gratitud hacia aquello que le ha dado el alma le llena por completo. Si no se sigue este camino de reverencia no es posible llegar a la claridad. Es esencial que las declaraciones del investigador espiritual estén formadas con esta claridad. Solo si este es el caso puede asumir la autoridad para hablar de las verdades del misticismo, las verdades de la antroposofía y de la ciencia espiritual. De esta manera funciona el investigador espiritual, y así debe empezar todo el mundo, de la manera más simple y elemental hasta que alcance la comprensión de estas enseñanzas. La individualidad humana y la de los seres cósmicos es profunda. Uno no puede lograr nada en esta área sin paciencia, perseverancia y amorosa devoción hacia los poderes cósmicos. Estas son fuerzas que, como la electricidad en el mundo exterior, son poderosas en el mundo interior. No son solo fuerzas morales sino fuerzas de cognición. Cuando el aspirante a la iluminación es capaz de permitir que estas verdades residan en su interior durante un tiempo, si las ha aceptado en gratitud hacia aquellos que se las han revelado entonces finalmente alcanzará un punto especial, que más tarde o más temprano se hará accesible a todos aquellos que han permitido que la tranquilidad y el silencio den frutos en su alma. Este es el momento en el que su alma empieza a hablar, cuando su propio ser interior empieza a percibir las grandes verdades eternas. Entonces, de repente el mundo a su alrededor se ilumina de colores nunca vistos antes. Algo jamás oído se hace ahora audible. El mundo irradiará una nueva luz. Esta nueva luz, esta nueva irradiación llega a el desde el reino del alma. Es característico del mundo del alma que uno lo "vea". Es igualmente característico del mundo de los espíritus que uno lo "escuche". Si se busca el auto-desarrollo en esta área entonces una parte de él viene a través de la obediencia y de la observación de una gran suma de reglas y directrices. Aquí solo puedo hacer un pequeño apunte de cómo esto es posible y de cómo puede ser experimentado. Es preciso seguir diligentemente estas reglas individuales, igual que el químico debe pesar y medir las más ínfimas substancias de un compuesto químico con los instrumentos más delicados. Una descripción de las reglas que se pueden dar en público se puede encontrar en mi libro, Conocimiento de Mundos Superiores y su Adquisición. Estas reglas ofrecen instrucciones específicas para seguir este camino. También requieren de una paciencia y una perseverancia diligentes. Las reglas presentadas en este libro nunca se habían hecho públicas con anterioridad, cuando la instrucción de lo oculto solo se enseñaba en las escuelas de lo oculto. Este tipo de instrucción todavía se enseña en las escuelas de lo oculto porque es un proceso de enseñanza íntimo entre dos personas. No es bueno buscar esta instrucción por propia iniciativa, escuchando o leyendo reglas especiales de forma fragmentada en un lugar u otro. Toda la instrucción que uno puede recibir de diferentes lugares, y de hecho hay tiendas anunciando este tipo de instrucciones, no son más que pequeños fragmentos sacados del gran libro de la enseñanza de lo oculto. Una persona que las utiliza debe darse cuenta que se expone a una serie de peligros. No es conveniente ser introducido en los asuntos que conllevan una alteración actual del alma, a los aspectos más profundamente importantes de la vida del alma, a través de los canales comerciales. Los métodos de entrenamiento de lo oculto que se anuncian a cambio de una ganancia monetaria no solo carecen de ningún valor sino que además pueden ser peligrosos según en qué circunstancias. Es necesario que esto sea dicho porque en la edad actual hay tanto de este tipo de cosas que confrontan al hombre. Precisamente porque hay tantos de estos supuestos métodos ocultos abarrotando la escena actual se ha hecho necesario mostrar la imagen real. Las reglas expuestas en el libro Conocimiento de Mundos Superiores y su Adquisición vienen de antiguas tradiciones. Los espíritus que guían la evolución han dado su permiso para la publicación de estas reglas porque es esencial que la verdad se dé a conocer, aunque aún solo es posible publicar una cierta cantidad. El resto ha de ser excluido porque las reglas más importantes solo se pueden desvelar de palabra. Lo que se encuentra en Conocimiento de Mundos Superiores y su Adquisición es diferente de otros libros de instrucción en que es inofensivo. Solo se desvelan las guías que no pueden dañar a la persona, incluso si no son seguidas con paciencia y perseverancia. Incluso si la persona hace un uso impropio de ellas no podrían dañarla. Era necesario mencionar este punto porque ha surgido la pregunta de por qué y con qué autoridad se han publicado un conjunto de leyes esotéricas.Otro punto de consideración es que para despertar en el mundo del alma uno debe tener órganos sensoriales en el mundo del alma igual que los tiene para el mundo material. Igual que el cuerpo, que tiene ojos y oídos, el alma y el espíritu deben poseer órganos para percibir la radiación del reino del alma y los sonidos del mundo del espíritu. Una persona que tenga experiencia en este campo, que es clarividente, puede actualmente percibir el proceso de desarrollo de ese tipo de órganos del alma en una persona que está llevando a cabo un entrenamiento interior. Son percibidos en su aura, envueltos en una nube de luz. El aura de una persona que no se ha desarrollado espiritualmente se ve como una formación nebulosa. Cuando la persona duerme el aura flota sobre el cuerpo físico porque el cuerpo astral se separa durante el sueño. El aspecto del aura es de dos espirales enredadas como anillos de niebla. Se entrelazan el uno con el otro en continuas espirales, desapareciendo en reinos indefinibles. Cuando una persona comienza el entrenamiento de lo oculto su aura se define cada vez más. Los extremos indefinidos de la espiral desaparecen y las dos formaciones espirales entrelazadas se vuelven claramente organizadas. Se convierten en estructuras compactas y bien definidas. Ciertos órganos aparecen en el aura y son llamados chacras en el lenguaje esotérico. Estos son los órganos sensoriales del alma. Su estructura es delicada y para que florezcan hay que cuidarlos y protegerlos. No pueden desarrollarse bajo ninguna otra circunstancia. Quien se desvíe de esto nunca disfrutará la verdadera percepción espiritual. La persona debe suprimir todas las sensaciones y los sentimientos negativos dentro de sí para nutrir estos ojos del alma. Los chacras no pueden emerger si una persona se enfada a cada oportunidad. Hay que preservar la ecuanimidad y hay que practicar la paciencia. La furia y la cólera no permiten que aparezcan los ojos del alma, la prisa y los nervios no permiten su desarrollo. Aún más, es necesario que el hombre se libere de algo que es difícil de apartar en nuestra civilización, el ansia de aprender "lo que es nuevo." Esto tiene una tremenda influencia en el órgano-alma. Si uno no puede hacerse con un periódico lo suficientemente rápido para contarle las noticias a algún otro, si una persona no puede ver o escuchar algo sin guardárselo, si no puede suprimir el deseo de transmitirlo, su alma nunca alcanzará el desarrollo. Es también necesario que uno adquiera una manera definida de juzgar a tus semejantes. Es difícil lograr una actitud acrítica, pero el entendimiento debe sustituir al criticismo. Si confrontas inmediatamente a tus semejantes con tu propia opinión obstaculizas la evolución del alma. Debemos escuchar al otro primero y este ejercicio es una manera muy efectiva de desarrollar los ojos del alma. Cualquiera que quiera alcanzar un nivel superior en esta dirección se lo debe a haber aprendido a abstenerse de criticar y de juzgar todo y a todo el mundo. ¿Cómo podemos ver y entender dentro del ser de una persona? No debemos condenar sino entender la personalidad del criminal, entender al criminal y al santo igual de bien. Se requiere empatía para todos y cada uno, esto es lo que quiere decir la "atención" oculta. Así, si la persona se conduce, con estricta autodisciplina, al punto de no evaluar a sus semejantes, a al resto del mundo de acuerdo con su juicio personal, opinión y prejuicio y en su lugar permite que ambos trabajen en él en silencio, entonces tiene la oportunidad de adquirir los poderes ocultos. Cada momento durante el cual una persona toma la determinación de resistirse a un pensamiento malvado acerca de sus semejantes es un momento ganado. Un hombre sabio puede aprender de un niño. Una persona simplona puede considerar los dichos de un sabio parecidos a los balbuceos de un niño, convencido de que es superior a un niño y desconociendo la practicalidad de la sabiduría. Solo cuando ha aprendido a escuchar el tartamudeo de un niño como si fuera una revelación ha creado en él el poder que surge de su alma. Finalmente uno no puede esperar que los ojos del alma se abran inmediatamente. Una persona que combate la ira, la cólera, la curiosidad y otras cualidades negativas está, para empezar, derribando los muros que encierran su alma. Este esfuerzo debe ser repetido constantemente. Una persona clarividente puede evaluar hasta dónde los delicados órganos del alma están floreciendo. Cuando las declaraciones humanas han perdido su agresividad y se han vuelto amables y llenas de comprensión hacia sus semejantes el órgano espiritual localizado junto a la laringe se despierta. Antes de que una persona se haga consciente de esto por si misma debe practicar durante mucho tiempo. Fueron necesarios millones de años para que se desarrollase el ojo físico en el hombre, desde unos minúsculos puntos hasta el comienzo de la lente y de ahí a la compleja estructura del ojo. El ojo del alma no necesita de tanto tiempo. En algunas personas es necesario varios meses, para tras más. Hay que tener paciencia. El momento en el que estas delicadas estructuras del alma comienzan a percibir por primera vez llega para todo el mundo, más tarde o más temprano. Eso si la persona continua los ejercicios y particularmente si desarrolla ciertas virtudes, las cuales las dificultades de la vida misma pueden desarrollar. Hay tres virtudes en particular que hay que desarrollar que casi pueden convertir a un hombre en clarividente, solo que hay que practicarlas con la necesaria intensidad y énfasis. Son estas: la autoconfianza emparejada con la humildad, el autocontrol junto con la gentileza y la presencia mental junto con la perseverancia. Todo esto son líneas generales, y así deben verse. Son ejemplos de las direcciones que el pupilo espiritual debe seguir en los tres niveles hacia el despertar espiritual. Las tres fases de la enseñanza de lo oculto son llamadas preparación o catarsis, iluminación o iniciación. Durante la primera fase o nivel, el ser del hombre esta preparado de manera que permita emerger a las delicadas estructuras del alma. En el nivel de la iluminación el hombre adquiere la habilidad de percibir en el reino del alma, y a través de la iniciación obtiene la facultad de expresarse a sí mismo en el reino del espíritu. Lo que he dicho esta noche puede que sea difícil de entender para algunos, y aunque es realmente fácil, si es cierto aquí que lo fácil es difícil. Cualquiera puede seguir el camino de lo oculto; no está cerrado para nadie. Los secretos residen están en el ser interior de cada persona. Solo se requiere un serio esfuerzo interior, el hombre debe intentar liberarse de todos los obstáculos que interrumpen esta vida interior. Hay que ser consciente de que las verdades más grandes y preclaras llegan a nosotros de la manera más íntima. Los más grandes sabios de la humanidad no descubrieron las grandes verdades siguiendo cualquier otro camino que no fuese el que aquí se menciona. Encontraron estas verdades porque encontraron el camino que lleva a su ser interior y porque sabían que la paciencia y la perseverancia eran requeridas para practicar los diferentes ejercicios. Así, cuando una persona alcanza lo más profundo de su ser, cuando se aleja de los pensamientos que le asaltan desde el exterior y en vez de eso se concentra en los pensamientos que pertenecen a la eternidad, está avivando la llama dentro de sí que le iluminará los mundos del alma. Cuando una persona desarrolla dentro de sí las cualidades de la ecuanimidad, la calma interior y la paz igual que las otras virtudes aquí mencionadas, está alimentando a esta dama con la substancia adecuada. Si una persona es capaz de mantenerse en silencio y expresar solo pensamientos elevados, si vive una existencia llena de amor y su vida se convierte en una vida de devoción a lo divino, el mundo a su alrededor empezará a "sonar." Esto es lo que Pitágoras llamó "Música de las esferas". No se quería decir simbólicamente; es una realidad.
Solo es posible dar aquí pequeñas pistas que guíen en la dirección del camino que lleva a la puerta estrecha. Cualquiera puede alcanzar esta puerta estrecha y para aquel que no tiene miedo de las dificultades la puerta se abrirá. Entonces encontrará lo que todas las grandes ideologías religiosas y filosóficas han proclamado: La Verdad Única Eterna y la Vía de la Vida. Traducido Gonzalo Pavillard