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11 de febrero de 2017

Como terminar con el estado de decadencia de la sociedad actual y generar nuevos lazos con Yahshua Ha Massiah.

                                                                            (Dedicado a mi amaDa)


                                                       




En realidad esta es solo una proposición porque pueden haber otras maneras de efectuarlo, pero sea cual sea la manera en que se haga es necesaria la generación de lazos afectivos con Cristo Jesús.

Crear vínculos con Cristo Jesús. Cómo crear vínculos con Cristo Jesús que al día de hoy se encuentran rotos y esto debido a que el diablo (o el adversario) a través de su sistema de cosas se dedicó a romper con nuestros vínculos aquellos que teníamos con Yahschua, Cristo Jesús en estos momentos.

Por mucho tiempo este sistema de cosas y la vida que llevamos, qué fue creada por el mismísimo diablo y su familia y todas las jerarquías que cayeron hace millones de años atrás, ha estado metido en nosotros, de manera tal que nos hemos olvidado de todo nuestro pasado y no entendemos que lo que tenemos al día de hoy suele ser parte de un sistema de creencias, la mayoría son impuestas y las otras simplemente asumidas. 
  De unas pocas personas que tienden a despertar y tratan de buscar una verdad, la mayoría permanece en un estado de hibernación espiritual, así nos encontramos en un estado actual, en el cual con precisión, ya no hablo específicamente del sino que me refiero a que aquí actualmente mantenemos las grandes interrogantes de la humanidad, no tenemos ninguna idea de cuál es nuestro verdadero origen; porqué nos encontramos aquí en este planeta; qué es lo que estamos haciendo; y cual es nuestro destino. 
 Por así decirlo a título ejemplar, todas estas interrogantes han encontrado alguna referencia a través de personas con algún tipo de iluminación. Revelaciones que han sido inspiradas por algún tipo de comunicación divina para recibir lo que se acerca a una verdad, son filósofos los que se preguntaban esto en la antigüedad y hoy en día unas pocas personas se pueden interrogar a si mismas de manera mas profunda pero pocas se dedican a buscar la verdad como algo que requiera una prioridad. 
    Se abandonó el buscar las respuestas a esto, por entender y ceder algo íntimo de alguna manera a la ciencia, la que en sus mentiras de las que están convencidos por cierto, nos hemos ido enajenando mas y mas de nuestra realidad, pero ellos no tienen idea de la verdad de todos estos cuestionamientos y siguen el día a día sin ninguna meta mas allá de la material y en consecuencia por la tradición de lo que nos ha sido transmitido por esta ciencia terrestre y por las distintas religiones cuyas creencias han sido aceptadas; de tal manera que sólo hay repeticiones constantes pero no una investigación profunda acerca de nuestro origen, de donde provenimos, como fuimos creados. 
    La ciencia y la religión tienen un proceder qué implica bastante soberbia y cuyos integrantes poseen una autoridad se le las da el mismo sistema de cosas creado por el diablo. Así llegamos a la conclusión de que somos seres insertados en un sistema de cosas, en una forma de vida y estructuras que afirman y sostienen este sistema y los paradigmas en los que se sustentó.
     Algo que se suele decir en algunos libros, también en algunos guiones de películas y en los libros sagrados por supuesto, es que no somos materia, somos seres de luz que estamos inmersos y atrapados en ella: El punto es como salir de ahí de este estado en el que nos encontramos insertos. Y la única y absoluta verdad es la señalada por Cristo Jesús, él es. El es el camino, la verdad y la vida y no hay ni ha habido otro, ningún otro. Nadie se le puede comparar.
     ¿Quieren encontrar las respuestas a las interrogantes de la humanidad? ¿Descubrir la verdad?, Cristo Jesús. El tiene las respuestas, porque el es la verdad y la verdad proviene de el, todo en este mundo es falso de tal modo que si se quiere de corazón encontrar las verdades debe uno reconciliarse con Cristo Jesús, de partida, si uno piensa en él, de corazón, el escuchará este pensamiento y si tratamos de ir mas allá con el, puede hasta resultar que fluya algún tipo de comunicación que nos permita recibir algo. Es difícil pero no imposible, es difícil porque el constructor de estos cuerpos humanos fue el diablo y se preocupó en que no tuviésemos mecanismos de comunicación aptos para establecer una relación con la divinidad verdadera, sin embargo la experiencia dice que el que la sigue la consigue, tal vez antes esto era lento y requería varias vidas o encarnaciones, pero en la actualidad se ha derramado mucha gracia y hecho un tremendo esfuerzo con el objetivo de lograr nuestro despertar. 
      ¿Quieres romper con el sistema horrible en que vivimos? Pues hay un camino y este se llama Cristo Jesús, vuelca tu vida a seguir su enseñanza con inteligencia y con fe, no como lo dicen las religiones que se montaron usurpando el nombre de Cristo Jesús para conseguir sus objetivos e intereses materialistas y de control sobre la espiritualidad de la humanidad. ( La creación de las religiones fue una de las estrategias del anticristo para lograr el apoderamiento de las almas) 
        Y por último, si estás cansado de seguir vida tras vida yendo de una cosa a otra sin ningún rumbo determinado, mas que el impuesto por la oscuridad y quieres terminar con esta ronda de reencarnaciones indefinida, Cristo Jesús, el es la vida, la verdadera, no este estado de muerte en que nos encontramos.  
Aunque ahora lo desconozcamos todos tenemos conocimiento sobre el y no me refiero a la encarnación en la materia como Cristo Jesús, sino al Dios por cuyo ser todo fue creado en estos universos y con ese supremo ser hay que reconciliarse, pedir perdón con humidad, por aquello en que nos hemos convertido y pedirle una nueva oportunidad para salir del encierro en la 3D y resucitar a la vida y ser por supuesto coherentes en nuestro actuar desde ese momento. Depende de nosotros el revertir parte de aquello en lo que nos encontramos de tal manera que dar el paso hacia Cristo es básico para que el de pasos hacia nosotros.